20 agosto 2010

MI TESORO!

Se han quedado atrás muchas cosas, como vagos recuerdos de un tiempo lejano que en verdad dejó de existir hace pocos días.
Ahora Khanimambo es otra cosa, ya no es un tesoro que sólo me pertenecía a mí y a quienes más cerca estaban de los pequeños y primeros maravillosos descubrimientos. Khanimambo ya no es un despertar tras otro como algo milagroso. Ya no es un solo niño ni una sola etapa.
Vamos acumulando etapas, niños, descubrimientos, avances… toca seguir. Es imparable. Y Así, se van quedando atrás esos días en los que me tuve que despertar a fuerza de ilusión por crear algo que algún día viviría sólo.
Eso ya existe. Lo sé reconocer… miro de lejos, sin que me vean los demás. Y veo un ritmo, un horario, unos juegos, unas pandillas, unos papeles encima de una mesa que no es la mía, historias en las que sólo me toca escuchar… eso que veo de lejos es Khanimambo. Lo creé yo… pero ahora toca dejarlo crecer a su ritmo y yo ya no lo marco.



Khanimambo tiene vida propia, y esto es, me imagino… comparable a ese momento en que una madre debe dejar que su hijo haga su camino.
Seguiré aquí, a su lado. En todo lo que me necesite, Khanimambo siempre me tendrá.